Ejercicio: Ya sea que lo ames o lo odies, todos podemos estar de acuerdo en que si lo vas a hacer, debe ser lo más beneficioso y efectivo posible. No importa si te ejercitas por la estabilidad mental y las endorfinas positivas que puede proporcionar, o si estás tratando de deshacerte de algunos kilos de más; todos queremos sentir que el tiempo que pasamos en el gimnasio valió la pena.
Sin embargo, cuando llega el momento de poner manos a la obra, la mayoría de nosotros no sabemos por dónde empezar para maximizar nuestro entrenamiento. ¿Debo beber o comer de antemano? ¿Y el estiramiento? ¿O tal vez debería tomar un suplemento? Las preguntas son aparentemente interminables, y cuando se trata de nuestra salud, no nos gusta perder el tiempo. Sigue leyendo para descubrir las cosas que debes hacer para aprovechar al máximo el ejercicio.
Cómo hacer que el ejercicio sea efectivo realmente
1. Planifica con anticipación
Cuando se trata de maximizar el ejercicio, todo comienza con decidir cuándo comenzar. La mayoría de los expertos coinciden en que los entrenamientos matutinos tienden a ser los más efectivos. Empieza el día con cualquier tipo de ejercicio para poner en marcha tu metabolismo. Maximiza los beneficios de tu entrenamiento porque quemarás calorías durante todo el día. ¡Solo 15 minutos de ejercicio matutino marcarán la diferencia!
Pero, ¿qué pasa si tu horario no te permite hacer ejercicio temprano en la mañana? O, seamos honestos, tal vez no seas una persona mañanera. Por encima de todo, la buena noticia es que la coherencia en tu programa de ejercicios es el componente más importante para maximizar los efectos de tu entrenamiento. Según la investigación, no existen grandes diferencias entre los entrenamientos matutinos y vespertinos. De hecho, hacer ejercicio por la noche puede ofrecer una ventaja en cuanto a potencia y capacidad de trabajo.
La conclusión es que no importa cuándo elijas entrenar, apegarte a tu compromiso y ser constante es la salsa mágica que conduce a los resultados. Así que anótalo, prográmalo, configura alarmas, todo lo que necesites hacer para asegurarte de cumplir con tu rutina.
2. El estiramiento dinámico es crucial
Lo sabemos, estirar antes de un entrenamiento parece un truco obvio para tener un viaje efectivo al gimnasio. Pero te sorprenderías de cuántas personas se apresuran a realizar este importante paso o incluso lo ignoran por completo. El estiramiento calentará los músculos y te protegerá de dolor después del entrenamiento. Saltarse este paso podría ser el factor decisivo de toda tu rutina de ejercicios.
Calentar con estiramientos dinámicos es especialmente importante a medida que envejecemos, y hacer ejercicio sin preparar el cuerpo con estiramientos dinámicos puede provocar rigidez y dolor, lo que no es divertido para nadie. Toma las medidas necesarias para protegerte y ten el entrenamiento más seguro y agradable.
3. Usa un rodillo de espuma
Los rodillos de espuma son una tendencia de fitness creciente que entusiasma a numerosas celebridades y entrenadores. No solo se puede usar de forma terapéutica para aliviar el estrés, sino que también es una herramienta poderosa y simple que es extremadamente beneficiosa para el cuerpo, ya que estimula la circulación y el sistema linfático, para ayudar a erradicar toxinas y hacer que los músculos se vean y se sientan más flexibles. Usa esta herramienta antes del entrenamiento para obtener mejores resultados.
4. Come y bebe de manera saludable
Existen opiniones contradictorias sobre si debes comer y beber antes de hacer ejercicio, pero estudios recientes han encontrado que podrías beneficiarte de mejores resultados en tu entrenamiento si las comidas se eligen sabiamente. En términos de hidratación, se recomienda beber de dos a tres tazas de agua unas horas antes de que planees hacer ejercicio para maximizar los niveles de hidratación durante el entrenamiento.
De igual manera, puedes optar por tomar una taza de café antes del entrenamiento: La cafeína ayudará a estimular tu sistema nervioso para mejorar el rendimiento.
Los carbohidratos y las proteínas magras son las mejores opciones cuando se trata de comidas antes del entrenamiento. Ingiere una comida baja en grasas una hora antes de tu entrenamiento.
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5. Prueba un suplemento
Si no tienes mucha experiencia en tu rutina de ejercicios, la idea de agregar un suplemento puede ser un poco aterradora. No temas: Los estudios han descubierto que tomar suplementos antes del entrenamiento es un método seguro y eficaz para aumentar la energía antes de hacer ejercicio. Los suplementos generalmente contienen cafeína, que es el ingrediente principal responsable de los beneficios que sientes.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que, si bien los suplementos pueden ayudar a frenar la fatiga y mejorar la concentración durante los entrenamientos, los investigadores aún no han descubierto que produzcan un efecto sustancial en la composición corporal. Así que prueba un suplemento si te estás retirando a la mitad de tu rutina, ya que puede ayudar a tu mentalidad general, pero no esperes que tu cuerpo se transforme de la noche a la mañana. Y consulta con tu médico para asegurarte de que agregar un suplemento sea la opción correcta para ti.