Uno de los mayores defectos que tenemos muchas de nosotros es que no sabemos comer con cabeza. No creo que sea el único que grite en voz alta: Me encanta comer! Y es que comer, es uno de los placer de la vida, y por ellos muchos de nosotros caemos en el error de comer todo lo que veamos. No tengo que añadir que ese estilo de vida pasará factura a corto, medio y largo plazo. En el post de hoy os contaré mi experiencia con la comida en los últimos dos meses y lo que me he propuesto para mejorar mis hábitos.
Mi problema en los últimos dos meses con la comida
Perdí el control. Puede parecer extraño empezar con esa frase, pero es la que mejor define lo que he vivido estos meses. Me he ido olvidado del ejercicio. Yo salía a correr dos o tres veces por semana cada mañana antes de empezar a trabajar. Es uno de las mejores opcion de empezar la mañana, aparte de un buen desayuno. Pero con el frío las ganas de correr desaparecen enseguida. En mi caso, deje de correr por las mañanas y me olvide de cualquier tipo de ejercicio. Me olvide de comer bien y empeze a comer de todo a todas horas.
Eso uno de los mayores problemas que podemos cometer, es comer de todo entre mesas. Y ya si hablamos de bollería o cosas de esas, apaga y vámonos.
El triste resultado
El triste resultado de dejar de comer bien y de hacer ejercicio se notó en poco tiempo. Los pantalones que utilizaba meses atrás, que me entraban a la perfección y me sobraba, ya ni me los podría abrochar. Ya por no hablar de la barriga.
La comida basura por muy buena pinta que tenga y el buen sabor no ayudaba nada. Pero bueno, después de un problema de salud, me di cuenta que tenia que cambiar mis hábitos y mi rutina.
Se adelgaza comiendo bien
Hay algunos productos adelgazantes que funcionan muy bien si se toman con constancia. Pero yo me propuse hacer algunos cambios normales pero importantes.
Dejé de comer tanto, y me propuse varias cosas personales: Una de ellas, era dejar de comer entre mesas. Otra importante es desayunar siempre bien. Algo que me ayuda aguantar todo el día sin ganas de comer hasta la hora de la comida, y que además me proporciona la energía necesaria. Comer lento. Mi problema siempre ha sido que comía muy rápido siempre y eso es algo muy malo para la salud. Así que ahora soy el más lento de la mesa, y me encuentro mucho mejor. Beber agua, volver a hacer ejercicio.
Teniendo estos hábitos no solo conegui no engordar más, sino que también adelgazar.