La primavera ha llegado oficialmente, dando paso a más luz del día, días más cálidos y, lo has adivinado, la limpieza. Aunque nuestros hogares son lo primero en lo que pensamos y reciben todo el cariño cuando se trata de la limpieza, hay otra área de nuestras vidas a la que le vendría bien un buen arreglo con el cambio de estación: nuestras rutinas de bienestar. Al igual que organizamos y desordenamos nuestro espacio con la transición del invierno a la primavera, deberíamos renovar nuestros rituales de bienestar, deberíamos aprender cómo limpiar tu rutina de bienestar en un día.
Con unos sencillos ajustes en todo, desde cómo mueves tu cuerpo hasta cómo gestionas el dinero (sí, tus finanzas forman parte de tu rutina de bienestar porque afectan a tu salud en general), estarás en camino de tu mejor versión.
Cómo limpiar tu rutina de bienestar en un día
Sigue leyendo para obtener consejos sobre cómo limpiar tu rutina de bienestar en un día para empezar con buen pie la nueva temporada y más allá.
Para limpiar tu dieta…
Cuando estamos en modo hibernación durante el invierno, a nuestros cuerpos les apetece comida reconfortante (es decir, comidas más sustanciosas), pero ahora probablemente estés empezando a desear algo más fresco y ligero. Pero olvídate de las voces que te dicen que hagas una limpieza y comas sólo alimentos considerados «limpios» y, en su lugar, come de forma intuitiva y de temporada.
¿El mejor lugar para empezar? La nevera, el congelador y la despensa. Elimina los productos caducados y los alimentos que no te hagan sentir bien. Después, reabastece tu cocina con alimentos más ligeros que a tu cuerpo le apetezcan durante este cambio de estación.
¿Lista para empezar a planificar las comidas? Dirígete al mercado agrícola y busca verduras de hoja verde o espárragos y frutas en forma de fresas y kiwis. Si planificas tus comidas teniendo en cuenta los productos locales de temporada, no sólo obtendrás un mayor valor nutritivo, sino también un dinero extra en el bolsillo.
Para limpiar tu régimen de cuidado de la piel…
Una nueva estación exige un cambio en el cuidado de la piel. Lo primero que hay que hacer es eliminar todos los productos caducados. ¿No sabes cuánto tiempo hace que tienes tu crema hidratante? Si tiene un olor o color extraño o los aceites se han separado, es seguro que ya ha pasado su mejor momento.
Cambia la crema limpiadora o el aceite que te ayudaron a pasar las noches secas de invierno por una alternativa en gel o una loción más ligera.
Para hacer una limpieza de tu autocuidado…
El autocuidado es personal y no tiene por qué ser extravagante, y puede ser una práctica diaria o simplemente algo que haces de vez en cuando, como traer una planta a tu espacio, encender una vela, tomarte un día libre en el trabajo o pasar la noche en casa y pedir pizza.
Sea cual sea tu estilo de autocuidado, debes saber que variará cada día. Digamos que hacer ejercicio o meditar es tu modo no negociable de autocuidado y le dedicas tiempo cada mañana. Puede que algunas mañanas no lo sientas, y no pasa nada. Caer en la trampa del sentimiento de culpa sólo compromete tu bienestar.
Para limpiar tu tecnología…
Echa un vistazo a las cuentas de redes sociales que sigues y dales a «dejar de seguir» si no te animan. Del mismo modo, cancela la suscripción a los correos electrónicos y boletines informativos que no hacen más que consumir tu tiempo. Libera espacio digital (y mental) ajustando las empresas con las que compartes tu correo electrónico.
Para ir un paso más allá, libera espacio de tu teléfono y haz una mini desintoxicación digital. Deshazte del teléfono durante la noche y sustitúyelo por un buen despertador. Créeme, tu cuerpo te agradecerá la calidad del sueño que obtendrás sin tu teléfono.
Para limpiar tu agenda…
Un truco fácil para equilibrar la vida laboral y personal que me ha ayudado a estar presente cuando no estoy trabajando es poner el teléfono en modo avión (¡que desaparezcan las distracciones!). Yo también soy culpable de ponerme en modo multitarea, pero me doy cuenta de que cuando me fijo un bloque de tiempo para centrarme en realizar una tarea cada vez, acabo ahorrando tiempo.
Aprovecha esta nueva temporada para dar un paso atrás y analizar tus pérdidas de tiempo frente a las valiosas tareas pendientes. Esto es válido tanto para la vida personal como para el trabajo.
Para hacer limpiezade tus finanzas…
Ahora es un momento tan bueno como cualquier otro para revisar tus objetivos financieros y reevaluar cualquier gasto que pueda estar impidiéndote ajustarte al presupuesto. Por ejemplo, elabora un plan actualizado para saldar deudas, comprueba los extractos de tu tarjeta de crédito en busca de gastos innecesarios y revisa tu presupuesto.