Tener una oficina en casa se ha vuelto sumamente común. Durante la pandemia, más y más personas han comenzado a trabajar desde casa. Ya sea que tu trabajo fuera freelance desde el principio o que el Covid-19 haya cambiado tus hábitos, es probable que hayas tenido que crear un espacio seguro donde el enfoque y la atención sean clave. En una habitación específica de la casa o en diferentes lugares según los hábitos familiares, tu oficina en casa debe iluminarse y las lámparas que funcionan con baterías pueden ayudar.

Ligeras e inalámbricas, estas piezas de diseño te ayudan a crear el ambiente perfecto para trabajar, leer o escribir en cualquier lugar y en cualquier momento. Aprende a elegirlas y mejora tu espacio de trabajo con poco esfuerzo.

Estilo y función combinados

La lámpara inalámbrica perfecta es pequeña, fácil de transportar y potente al mismo tiempo. Si la tuya es una oficina en casa ambulante, deberás iluminar rápidamente cada rincón de tu hogar en un santiamén. Al cambiar de posición de la sala de estar al dormitorio a un estudio real, una lámpara de batería te seguirá a todas partes.

Sin embargo, también necesitas un ambiente familiar, relajante y acogedor. La forma, el color, la tela y el material te ayudarán a crear un espacio personalizado y a encontrar tu propio rincón dondequiera que estés. Elige tu color favorito o una forma que te brinde vibraciones felices y alegres para comenzar la jornada laboral con la energía adecuada. O bien, prueba con un rayo de luz relajante y familiar para abrazarte durante las horas de trabajo más estresantes.

La lámpara de batería también debe ser potente para seguir sus largas horas de trabajo sin fallarte. Elige una bombilla de luz LED que te brinde la máxima luz y el mínimo desperdicio de energía. Un buen sistema de recarga también es importante para darte libertad y espacio. Una lámpara con carga USB podría ser la mejor opción, ya que puedes cargarla mientras trabajas en tu ordenador portátil.

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¿Dónde poner tu lámpara de trabajo?

Aprovecha la luz natural siempre que sea posible. Elegir la mañana y las primeras horas de la tarde como tu horario de trabajo favorito te ayudará a utilizar la menor cantidad de luz artificial posible. Sin embargo, si los husos horarios, los hábitos familiares o las vacaciones te obligan a trabajar de noche, la lámpara de mesa adecuada será tu mejor amiga.

Elige una lámpara liviana y de tamaño pequeño para ocupar el menor espacio posible en tu escritorio. Luego, intenta encontrar una bombilla potente para iluminar la oscuridad total, incluso si trabajas al aire libre bajo las estrellas o si tu pareja e hijos están durmiendo. La lámpara perfecta que funciona con pilas te proporcionará un haz de luz brillante y directo para iluminar tu escritorio de trabajo y nada más.

Siempre que sea posible, coloca tu lámpara detrás de tu espalda, dando así brillo total a tus hojas de trabajo y libros. Si estás trabajando en un ordenador portátil, elige una luz fría y organiza tu posición para que no cree reflejos molestos en la pantalla. Ten cuidado también con la temperatura y la intensidad de la luz: Una lámpara led regulable podría resolver muchos problemas, proporcionando una luz perfecta en cualquier condición posible

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