Aunque puede resultar tentador dejar de lado los objetivos de salud este verano, hay una forma de de aprender cómo alcanzar tus objetivos de salud sin dejar de disfrutar todo lo que los próximos meses tienen que ofrecer. Así que si quieres seguir con tu rutina de ejercicios, mantener una dieta saludable o mejorar tu salud mental, aquí hay varios trucos para mantener tus objetivos de salud bajo control (sin dejar de disfrutar plenamente de la temporada).
Es fácil dejar de lado nuestros objetivos de salud cuando, miremos donde miremos, la gente está viajando por Europa o descansando junto a la piscina con una copa de vino. Parece que el 1 de enero fue hace toda una vida cuando nos fijamos el objetivo de hacer ejercicio tres veces a la semana o meditar todos los días durante 10 minutos.
Cómo alcanzar tus objetivos de salud
Si el día de Año Nuevo está hecho para fijarse propósitos, el verano es la prueba definitiva de esas metas. Por eso te diremos cómo alcanzar tus objetivos de salud y estar en forma en verano.
Adáptate a la estación y elabora un plan
Revisa tus objetivos y ve dónde puedes hacer ajustes para aprovechar al máximo esta temporada. Por ejemplo, si tu objetivo era hacer más ejercicio, pero la idea de ir al gimnasio cuando hace sol te parece horrible, traslada tu entrenamiento al aire libre. Escribir tu plan ayuda a ponerlo en marcha y te hace responsable de tus intenciones.
En enero, cuando fijaste tus objetivos de salud, probablemente estabas ansiosa, motivada y comprometida. Seis meses después, es posible que el entusiasmo inicial por cumplirlos haya disminuido, y no pasa nada. Sólo significa que ha llegado el momento de reevaluar y elaborar un nuevo plan, específicamente para el verano.
Dedica tiempo a tus objetivos
Quieres tener una energía, una digestión y un estado de ánimo óptimos para poder disfrutar plenamente de todos los momentos especiales. Sacar tiempo para llevar a cabo el plan antes mencionado debe tener la misma prioridad que una reunión de trabajo o un encuentro con amigos. Programa un bloque de tiempo en tu calendario cada día o cada semana durante todo el verano, ¡y cúmplelo!
Para la mayoría de nosotros, el verano es la época más ajetreada del año. Viajamos más, asistimos a más bodas y tenemos un calendario social más apretado, lo que hace más difícil encontrar tiempo para dar prioridad a nuestros objetivos de salud. Pero poder disfrutar de todo lo que nos ofrece el verano depende de nuestra salud, así que tenemos que dedicarle tiempo.
Encuentra un compañero
Tener un compañero que te rinda cuentas no sólo hace que sea más probable que cumpla tus objetivos, sino que también hace que ejecutarlos sea mucho más divertido. Encuentra a alguien que comparta contigo objetivos de salud similares y elaboren juntos un plan para mantenerlos.
Apúntate a las mismas clases de gimnasia, queden para hacer la compra o envíense mensajes de texto todos los días. Tener a alguien con quien compartir tu viaje por la salud permite un ambiente más alentador.
Proporciona un refuerzo positivo
Intenta replantear tu forma de enfocar los objetivos planificando eventos o viajes divertidos como la «palmadita en la espalda» por tu duro trabajo. Es la mejor forma de asegurarte de que cumples tus objetivos.
¿Recuerdas cuando eras niño y te recompensaban por algo bueno que hacías? Tal vez era una galleta después de comer por hacer los deberes o una cita para jugar con los amigos después de hacer las tareas domésticas. No estoy diciendo que debas recompensarte cada vez que te acerques un paso más a tus objetivos, pero a veces un cambio de mentalidad puede ayudar.
Prepárate para viajar
Si eres como yo, cuentas los días que faltan para las vacaciones con impaciencia, pero también te preocupa cómo vas a mantener algo parecido a una rutina de bienestar mientras estás fuera. A lo largo de los años. Esto puede significar hacer un entrenamiento de media hora por la mañana antes de que se despierte todo el mundo, llevar suplementos que puedan ayudar a tu sistema o tomarte un tiempo cada día para meditar o escribir un diario. Sean cuales sean tus objetivos de salud, hay una forma de adaptarlos a los viajes. Puede que tu rutina no sea exactamente la misma que en casa, pero eso forma parte de llevar una vida equilibrada.
Reflexiona sobre tus progresos
Con cualquier objetivo a largo plazo, es necesario tomarse tiempo para reflexionar sobre los progresos, evaluar todo lo que se ha aprendido y hacer los ajustes necesarios para continuar. Si llevas seis meses meditando a diario y no te has rendido, ¡enhorabuena! Pero si te has caído del vagón un par de veces, tampoco pasa nada.
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Cada día es diferente, y en realidad no hay «vagón» del que caerse. Estar sano es simplemente adaptar cómo te presentas cada día. No importa en qué punto del camino te encuentres, siéntete orgullosa de lo que has conseguido. El bienestar es un viaje que dura toda la vida, y reflexionar sobre tu progreso es una de las muchas alegrías de ello.